No dejamos pasar ninguna una oportunidad. Por eso, aprovechamos esta Semana Santa para hacer roscos, típicos de la época. En un curso de cocina donde nos lo pasamos fenomenal, un grupo de nuestras residentes más «cocinitas» se pusieron manos a la masa. El resultado, salta a la vista. Y no digamos quién probó los dulces. ¡Para chuparse los dedos!